domingo, 18 de septiembre de 2011

Se atrevió a mirarse en el espejo del baño y comprobó lo que le daba miedo admitir:que estaba gorda.No pudo por menos que coger la cuchilla y hacerse un corte limpio en la muñeca.Rápidamente se tapó con un algodón la marca,y hasta que no estuvo segura de que había dejado de sangrar, no se lo retiró.Se miró al espejo,y comprobó que seguía siendo ella.Esa niña(más bien adolescente)que había sido siempre.Con el pelo liso de color marrón oscuro y esos ojos pequeños marrón chocolate con pestañas largas y oscuras.Era la misma salvo por el hecho de que era na completa bola de grasa.Sus padres le decían que estaba delgada,pero ella no les creía.Todos mentían.No se puede ser delgada cuando una se ve gorda.Se recordó a si misma que no podía caer en esas palabras.Estaba gorda y lo sabía.Aunque no podía entender como una persona gorda podía pesar sólo 39 Kilos a los 16.Tendría que adelgazar más si no quería dejar de poder pasar por la puerta.Esa sería su próxima misión

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